Por Brenda Morales, Socia Directora

La buena transmisión de las ideas es una necesidad de la vida en sociedad, pero es imperante cuando se es vocero de una organización, pues el impacto de las declaraciones en medios de comunicación puede mejorar o perjudicar la reputación de marcas, empresas, partidos políticos, organizaciones religiosas o corporaciones enteras.

Por tanto, es menester de quienes fungen como portavoces estar preparados para dar mensajes que sean correctos y abonen a los objetivos de la estrategia de comunicación.

Conocer la dinámica de los diferentes formatos (periódicos, revistas, canales de radio, televisión y programas online) y el arte de transmitir datos relevantes para las audiencias es parte de las ventajas de tomar un “Media Training”.

Sin embargo, el buen vocero se hace con la práctica y el relacionamiento que cultive proactivamente con líderes de opinión y periodistas.

Manejar técnicas y herramientas para hacer de la información un activo creíble, accesible y sustentable; transmitir conceptos precisos y adecuados sobre todo en situaciones de crisis, o lograr un encuentro de mutuo provecho entre periodistas/medios y voceros/corporaciones son algunos de los aprendizajes que brinda el media coaching, y que complementan las habilidades personales de escucha, empatía y asertividad de quien tiene la importante responsabilidad de gestionar y administrar las relaciones mediáticas de su empresa.